CALDERINES DE AIRE

Los depósitos llamados también calderines pueden ser horizontales o verticales siendo estos últimos los más idóneos para colocar en los lugares en donde el espacio es más reducido, reúnen todas las características técnicas necesarias para almacenar el aire comprimido producido por un compresor.

Los calderines de aire deben de colocarse en lugares frescos lo más cerca posible del compresor y preferiblemente fuera de las instalaciones para que se pueda esparcir parte del calor que se produce durante la compresión y salvo que estén instalados en áreas en donde el ambiente es muy seco, se recomienda que lleve conectado un sistema de purga adecuado. Estos depósitos deben de sujetarse de forma firme en el suelo para evitar las vibraciones que se puedan producir por las pulsaciones de aire. El volumen del depósito dependerá de la capacidad del compresor y del consumo de aire comprimido. 

Los depósitos aportan a las instalaciones efectos beneficiosos:

-Compensa las variaciones de presión que se producen en la red.

-Permiten tiempos de descanso en el compresor, mejorando su equilibrio térmico enfriando el aire, recogiendo gran cantidad de condensado, proporcionando un caudal estable y alargando la vida útil.

-Facilita que el aire procedente del compresor se enfríe influyendo el tamaño y por tanto la cantidad de agua retenida

-Se puede considerar como un primer filtro ya que retiene las impurezas que proceden del compresor.

Todos los depósitos que almacenan aire a presión deberían de llevar incorporados:

-Válvula de seguridad

-Presostato de máxima-mínima presión para el control del compresor

-Manómetro

-Válvula de cierre

-Grifo de purga para eliminar el agua

-Compuerta de limpieza

 Existen varios tipos de calderines de aire:

 - Depósitos pintados:

Los depósitos pintados se utilizan la mayoría de las veces en lugares que no están expuestos a condiciones meteorológicas extremas y en donde no es necesario que el aire esté totalmente limpio. Gracias a la pintura estos depósitos están protegidos contra la corrosión.

 -Depósitos galvanizados:

La galvanización se utiliza para proteger el acero contra la corrosión. El proceso para galvanizar un calderín es muy sencillo ya que se sumerge por completo el depósito en un baño líquido de zinc quedando recubierta toda la superficie garantizando así una protección total del acero.

 -Depósitos vitri­fcados (de vitroflex):

 Estos depósitos están tratados con esmalte vítreo, haciéndolos más resistentes al agua y al vapor. Después de hornearse a 850 °C, el esmalte deja de absorber agua y protege totalmente el depósito de la corrosión.

 Estos depósitos han sido diseñados y construidos para cumplir con la normativa vigente sobre recipientes a presión, y son suministrados con sus correspondientes certificados.

¿Estás pensando en aumentar la capacidad de almacenamiento de tu compresor de aire? ¿Sabías qué contar con un depósito de aire para tu equipo con las dimensiones apropiadas, garantiza la mejora de varios aspectos de su funcionamiento?

El calderín de aire es mucho más que un tanque o depósito acumulador cuya función reducimos exclusivamente a la de almacenamiento. Sin embargo, se ha comprobado que de acuerdo a sus dimensiones pueden incidir positivamente en factores como:

• El rendimiento energético: reduciendo considerablemente los ciclos propios de la estación de carga y descarga.

• La reducción de las oscilaciones de presión 

• Mejorar la calidad del aire, facilitando su enfriamiento

• Garantizar el cumplimiento de la actividad en un mejor tiempo

• Aumenta la vida útil del compresor al permitir mayores tiempos de descanso

Evita correr riesgos innecesarios que pongan en peligro tu integridad y la vida útil de tu compresor, cambia el calderín de tu estación de aire y dile adiós a las preocupaciones.

Tipos de calderines de aire

Los depósitos de aire comprimido suelen tener forma cilíndrica, su altura es proporcional a 2 o 3 veces su diámetro y se pueden encontrar en formato vertical u horizontal elaborados con distintos tipos de materiales, siendo los más comunes los galvanizados.

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En Compresores de aire somos especialistas en venta de todo tipo de repuestos y accesorios de compresores de aire, contamos con la más variada gama de calderines de aire comprimido en diferentes presentaciones de materiales, color y dimensiones. 

Calderín para compresor de aire comprimido

El calderín, también conocido como depósito o tanque, es una parte esencial de cualquier sistema de aire comprimido. Actúa como un reservorio, permitiendo un suministro constante y regular de aire comprimido, garantizando el funcionamiento óptimo de tus herramientas y equipos. En compresores de aire, te ofrecemos una amplia gama de calderines diseñados para complementar y mejorar la eficiencia de tu compresor de aire.

Importancia del calderín en un sistema de aire comprimido

El calderín no solo sirve como almacenamiento, sino que también ayuda a estabilizar la presión del sistema, reducir la humedad y disminuir el desgaste del compresor al permitirle descansar entre ciclos. Es fundamental elegir el calderín adecuado para garantizar una operación segura y eficiente.

Características de nuestros calderines para compresores

- Resistencia: Fabricados con materiales de alta calidad, nuestros calderines están diseñados para soportar las presiones más altas y ofrecer una larga vida útil. - Versatilidad: Contamos con una variedad de capacidades y tamaños, asegurando que encuentres el calderín perfecto para tu compresor, ya sea para uso doméstico o industrial. - Seguridad: Todos nuestros calderines cumplen con los estándares de seguridad más rigurosos, garantizando un almacenamiento seguro de aire comprimido. Si buscas mejorar el rendimiento de tu compresor y garantizar una operación sin interrupciones, un calderín adecuado es imprescindible. Descubre nuestra selección de calderines en compresores de aire y da el siguiente paso hacia una eficiencia mejorada.